1 may 2007

Os Maios

No sé si esto se hace en otros sitios, creo que es una costumbre gallega.
Aquí, además de los actos programados por UGT, CCOO y otros sindicatos, desde muchísimo antes de que estos sindicatos apareciesen, el primero de mayo se celebran "Os Maios".

Los días previos, se recogen flores, cáscaras enteras de huevos, los frutos de los eucaliptos, hojas verdes... y otros elementos para cubrir unas estructuras de madera y hacer esto:



A parte, y como complemento a estos maios, las agrupaciones que los confeccionan, componen poemas satíricos donde ridiculizan, critican y comentan las cosas que pasan en los pueblos, generalmente rollos políticos, que si este alcalde esto, que si la Xunta lo otro... Son lo que se llaman coplas de escarnio e maldicir, que cantan alrededor de los maios, generalmente acompañados por los golpes de unos palos para generar la melodía.

Tienen un montón de horas de trabajo encima, de diseño, de recolección de elementos, de composición de coplas...
En el día de hoy, se celebran concursos de Maios, donde se exponen las figuras, se interpretan las coplas, y donde los niños venden cuartillas con las letras.

Hacía tiempo que no podía verlos, hoy he ido, y aunque puedo decir que no eran los mejores que he visto, la verdad es que son preciosos.




ACTUALIZACIÓN:
Gracias a Tiradete, me he dado cuenta de que me olvidaba de algo muy importante.
En la noche del 30 al 1, se suele colocar en las puertas de las casas, establos, etc etc, una rama de Xesta, para evitar que entren "os maios", es decir, una suerte de meigallo que podría traerte mala fortuna el resto del año (incluso llegar a morirte el ganado, cosa que hace unas décadas aún era un grave traspiés para la economía familiar).

Foto encontrada de aquí.

Esta es la Xesta florecida (cytisus purgans), una flor preciosa, también llamada codeso, piorno y retama. Tiene un aroma parecido al de la miel y por lo visto era una planta sagrada para los druídas celtas. Y buscando esto he sabido que se hacían escobas con sus ramas para barrer la casa para protegerla y purificarla.

9 comentarios:

tiradete dijo...

En la zona de Tui de la que soy oriundo se acostumbra a dejar una rama de un arbusto conocido aquí como "xesta" delante de cada puerta, portal y portalón de las casas o de las cuadras (los que dan al exterior) para que "non entre o maio", algo así que para que no nos entre ni a nosotros ni a los animales "o can", o sea la modorra a la hora de trabajar.

marmotilla dijo...

En Albarracín (Teruel) se celebra la fiesta de los mayos. Los mayos son los solteros, y cortejan a las mayas.
http://www.europapress.es/noticia.aspx?cod=20070422152319&ch=280

Carabiru dijo...

Ala! qué interesante, gracias Mamota!

Tiradete, gracias a ti tambien por recordarme ese detallito que me faltaba!!

Salu2

Tamaruca dijo...

Caramba qué preciosidad, no veía nada tan lindo desde las cruces de flores que hacen en Tenerife.

No sabía que Tiradete y tú érais galleguiños, qué guay 8-)

JT dijo...

Nunca había oído hablar de eso. Qué pasada, muy interesante.

Me recuerda un poco a las fallas: algo efímero, de contenido satírico...

¡Un punto de... (¿como era?) de... karma de ese! :P

tiradete dijo...

De nada, la verdad no me esperaba encontrar algo así por la blogosfera.
Soy gallego, natural de Tui (ciudad fronteriza con Portugal, bañada por el Río Miño, fundada por los griegos y con un casco histórico, catedral incluida, dignos de visitar), pero ahora vivo en Vigo.

La Xesta es de la familia del Codeso aunque estos últimos son más pequeños y las hojas son algo más redondeadas, pero la de la foto es una xesta.
Lo de los meigallos sí que no lo sabía.

Unknown dijo...

¡¡¡Yo he hecho escobas de esas, cuando trabajaba un verano para el ayuntamiento de Lalín (Pontevedra)!!!. Lo que ya no era tan agradable era usarlas, una vez hechas, jeje. Por cierto Marmota... eso que describes que hacen en Teruel, si no nos das más datos, casi te podría asegurar que se hace en muchos otros sitios del mundo, en todas las épocas del año, aunque eso sí, más en primavera dado el estado soliviantado de las hormonas. :-).
Ah, yo también soy gallego, y por aquí ya no se celebran como antes, pero aún va quedando algo de los Maios... generalmente, cuanto más pequeño es el lugar (economía más tradicional), más se celebran.

Pablo.- dijo...

Es una tradición muy antigua, que tiene distintas variantes en distintas partes del mundo, y que efectivamente, como dice Ender tiene algo que ver con una marea de cambios internos (hormonales, sobre todo) reflejo de un espectacular cambio exterior, en el que toda la naturaleza habla de fertilidad y vida.

Es también un momento crítico, la correcta floración garantiza la presencia de frutos y semillas, así que además de ser un festejo y manifestación de un hecho interior que se vive muy fuerte, y una celebración de la potencia dadora de vida de la naturaleza, también es un ritual propiciatorio: sin nombrarlos se llaman a espíritus o fuerzas naturales en ofrendas florales para que el tiempo en esas fechas críticas sea el que debe ser, de ello depende la cosecha del verano y la supervivencia de los pueblos.

Por eso digo que es antiguo, es de mucho antes de los romanos, probablemente del neolítico.

Si se mantuvo tras la invasión romana fue porque se acomodaba muy bien al culto a Ceres, la diosa de la tierra, esposa de Júpiter y protectora de cosechas y frutos., así como de las diosas Flora y Maya. Además, hasta coinciden en fechas. De todas formas probablemente tenga más que ver con los rituales centroeuropeos asociados al equinoccio de primavera.

Es curioso seguir encontrando fiestas tan paganas (un rito de propiciación de la fertilidad, nada menos) en pueblos tan católicos y reprimidos como nuestra tierra gallega. Pero es algo muy fuerte, sobre todo en gente muy ligada a la tierra. Se sienten sus pulsaciones y su sed de sol y de lluvia mucho más que a ese padre nuestro que está tan arriba y tan poco hace.

Hay veces que ciertas supersticiones hablan al hombre mucho más que todos sus sabios y todos los doctores de su iglesia, porque hablan desde dentro.

Pablo.- dijo...

Caray, cómo me he enrollado, perdón.